Calle Eslora
José Antonio Mayo Abargues
Publicado en El Mundo el 4 de marzo de 2008
El pasado sábado día 1, un coche atropelló a una niña en la calle Eslora de Mazagón, conocida popularmente como calle del “Negro” al parecer sin que las consecuencias hayan sido graves. La niña fue atendida en el centro de salud de Mazagón, y trasladada al hospital para su observación. Como resultado de los hechos fue necesaria la intervención de los agentes de la Policía Local, que tomaron declaración a los implicados.
Un mismo accidente es visto de forma diferente por distintos protagonistas y distintos testigos. Este accidente no iba a ser una excepción, pues fue motivo de discusión entre algunos de los presentes. Y no soy yo quién para juzgar si fue una imprudencia del conductor o si la niña, precipitadamente se le echó encima, pero creo que es conveniente que todos reflexionemos un poco respecto al tema. La calle Eslora es muy concurrida por los bares de tapeo que cada día atraen a más clientes. No es una calle de un tráfico excesivo, y eso hace que los clientes disfruten de una cierta tranquilidad en las terrazas. Por tanto, los conductores deben extremar al máximo las precauciones y los peatones han de ser conscientes de que están ocupando parte de la calzada y que el peligro puede aparecer en cualquier momento. El gobierno de la Mancomunidad también debe reflexionar sobre la necesidad de cortar la calle al tráfico, no sólo los domingos y festivos, como se viene haciendo hasta ahora, sino siempre que se espere una afluencia importante de gente, como los viernes, los sábados y las vísperas de todos los festivos. Es el mejor modo de evitar que accidentes similares se repitan en el futuro.
Publicado en El Mundo el 4 de marzo de 2008
El pasado sábado día 1, un coche atropelló a una niña en la calle Eslora de Mazagón, conocida popularmente como calle del “Negro” al parecer sin que las consecuencias hayan sido graves. La niña fue atendida en el centro de salud de Mazagón, y trasladada al hospital para su observación. Como resultado de los hechos fue necesaria la intervención de los agentes de la Policía Local, que tomaron declaración a los implicados.
Un mismo accidente es visto de forma diferente por distintos protagonistas y distintos testigos. Este accidente no iba a ser una excepción, pues fue motivo de discusión entre algunos de los presentes. Y no soy yo quién para juzgar si fue una imprudencia del conductor o si la niña, precipitadamente se le echó encima, pero creo que es conveniente que todos reflexionemos un poco respecto al tema. La calle Eslora es muy concurrida por los bares de tapeo que cada día atraen a más clientes. No es una calle de un tráfico excesivo, y eso hace que los clientes disfruten de una cierta tranquilidad en las terrazas. Por tanto, los conductores deben extremar al máximo las precauciones y los peatones han de ser conscientes de que están ocupando parte de la calzada y que el peligro puede aparecer en cualquier momento. El gobierno de la Mancomunidad también debe reflexionar sobre la necesidad de cortar la calle al tráfico, no sólo los domingos y festivos, como se viene haciendo hasta ahora, sino siempre que se espere una afluencia importante de gente, como los viernes, los sábados y las vísperas de todos los festivos. Es el mejor modo de evitar que accidentes similares se repitan en el futuro.
