FOTO: MAZAGÓN BEACH
PREVENCIÓN ANTE EL VERANO
EL CORTE DE DIGESTIÓN
De pequeño pensaba que eso de guardar la digestión era un cuento de nuestros padres para que les dejásemos dormir la siesta; pero más tarde me di cuenta de que esas dos o tres horas de reposo después de las comidas era algo muy serio que había que respetar.
Cuando se está en plena digestión, al entrar en el agua fría, se produce una falta de sangre en el sistema digestivo ya que se desplaza a órganos como la piel para equilibrar el cambio de temperatura de nuestro cuerpo con el agua, entonces, nos puede dar un corte de digestión.
También, después de haber estado expuesto al sol o después de haber realizado ejercicio físico, si nos sumergimos bajo el agua, puede ocurrir lo mismo, la diferencia de temperatura que existe entre nuestra piel y el agua puede provocar la aparición de los mismos síntomas.
¿CÓMO SE PUEDE PREVENIR?
Guardando la digestión, aunque el tiempo depende del tipo de comida que hagamos. No es lo mismo hacer una comida ligera que una copiosa. En cualquier caso, nunca hay que guardar menos de una hora y media. El limón, el ajo, las alcachofas y la fruta, favorecen la digestión.
EL CORTE DE DIGESTIÓN
De pequeño pensaba que eso de guardar la digestión era un cuento de nuestros padres para que les dejásemos dormir la siesta; pero más tarde me di cuenta de que esas dos o tres horas de reposo después de las comidas era algo muy serio que había que respetar.
Cuando se está en plena digestión, al entrar en el agua fría, se produce una falta de sangre en el sistema digestivo ya que se desplaza a órganos como la piel para equilibrar el cambio de temperatura de nuestro cuerpo con el agua, entonces, nos puede dar un corte de digestión.
También, después de haber estado expuesto al sol o después de haber realizado ejercicio físico, si nos sumergimos bajo el agua, puede ocurrir lo mismo, la diferencia de temperatura que existe entre nuestra piel y el agua puede provocar la aparición de los mismos síntomas.
¿CÓMO SE PUEDE PREVENIR?
Guardando la digestión, aunque el tiempo depende del tipo de comida que hagamos. No es lo mismo hacer una comida ligera que una copiosa. En cualquier caso, nunca hay que guardar menos de una hora y media. El limón, el ajo, las alcachofas y la fruta, favorecen la digestión.