A tan sólo 24 kilómetros de la capital por la N-442, Mazagón es una de las playas más recomendables y espectaculares de la provincia de Huelva. La playa, de arena fina, se extiende en una franja de hasta diez kilómetros desde la desembocadura del río Tinto hasta la Torre del Loro. Es una playa abierta donde es difícil encontrar aglomeraciones y con un área muy poco transitada.
Pero no sólo la playa sino que la misma localidad de Mazagón tiene un encanto especial. Se trata de una pequeña localidad que sobrevive gracias al turismo y que está muy poblada en verano y muy apacible en invierno. La actividad turística, como en otras muchas partes de España se comenzó ha desarrollar en los año setenta y en los últimos años, también como en muchas otras partes de España, ha vivido un auge espectacular de urbanismo. No obstante, no es la típica ciudad veraniega, llena de aglomeraciones y agobio sino todo lo contrario. Mazagón aparece a los ojos del visitante como un núcleo de población pequeño, muy esparcido, sin aglomeraciones de edificios.
Otro de los motivos para visitar Mazagón, es el Parador. El lugar donde está enclavado este establecimiento hotelero es uno de los puntos de la playa más concurridos. En fin, Mazagón da para mucho y su playa todavía más. ¿Qué se puede hacer con 10 kilómetros de espléndida playa con el Parque Natural de Doñana a un lado? Que cada uno imagine lo suyo. Si a uno le gusta el turismo de sol y playa pero no le gustan las aglomeraciones, éste es el lugar ideal para pasar unas largas vacaciones.
Pero no sólo la playa sino que la misma localidad de Mazagón tiene un encanto especial. Se trata de una pequeña localidad que sobrevive gracias al turismo y que está muy poblada en verano y muy apacible en invierno. La actividad turística, como en otras muchas partes de España se comenzó ha desarrollar en los año setenta y en los últimos años, también como en muchas otras partes de España, ha vivido un auge espectacular de urbanismo. No obstante, no es la típica ciudad veraniega, llena de aglomeraciones y agobio sino todo lo contrario. Mazagón aparece a los ojos del visitante como un núcleo de población pequeño, muy esparcido, sin aglomeraciones de edificios.
Otro de los motivos para visitar Mazagón, es el Parador. El lugar donde está enclavado este establecimiento hotelero es uno de los puntos de la playa más concurridos. En fin, Mazagón da para mucho y su playa todavía más. ¿Qué se puede hacer con 10 kilómetros de espléndida playa con el Parque Natural de Doñana a un lado? Que cada uno imagine lo suyo. Si a uno le gusta el turismo de sol y playa pero no le gustan las aglomeraciones, éste es el lugar ideal para pasar unas largas vacaciones.