FUENTE: www.lascosasclaras.com
Mazagón pueblo costero de la provincia de Huelva, perteneciente a Moguer, debe ser el pueblo más ruidoso de España sin lugar a dudas.
El ayuntamiento de Moguer se cachondea miserablemente de los vecinos de Mazagón y les mantiene en una constante vigilia todas las noches de los viernes y sábados. Moguer no entiende de normativas medioambientales ni de controles acústicos. La contaminación acústica de Mazagón es escandalosa por culpa de los numerosos vehículos que creen llevar una discoteca y a altas horas de la noche ponen la música a todo volumen y en cualquier parte de la población. Lo mismo ocurre con cualquier evento nocturno, los ruidos extremos están garantizados hasta las dos de la madrugada, pero lo peor son las discotecas al aire libre que sin permiso de apertura, sin medición acústica y con un volumen de sonido que machaca cualquier tímpano hasta las siete de la madrugada, están impunemente y con la permisibilidad de un ayuntamiento ignorante de las normas más elementales de civismo cachondeándose de gran parte de los vecinos de Mazagón.
De nada valen las denuncias y así llevan cinco años y cuando esto ocurre algo huele mal, ¿Connivencia? ¿favores? Todo es muy sospechoso. Los vecinos ya han llegado al límite y se avecinan cortes de carreteras y denuncias en instancias judiciales.
Lo más sorprendente es que el ayuntamiento de Moguer entiende esta actitud como una forma de atraer al turismo ¡Habráse visto mayor ignorancia!
Mazagón pueblo costero de la provincia de Huelva, perteneciente a Moguer, debe ser el pueblo más ruidoso de España sin lugar a dudas.
El ayuntamiento de Moguer se cachondea miserablemente de los vecinos de Mazagón y les mantiene en una constante vigilia todas las noches de los viernes y sábados. Moguer no entiende de normativas medioambientales ni de controles acústicos. La contaminación acústica de Mazagón es escandalosa por culpa de los numerosos vehículos que creen llevar una discoteca y a altas horas de la noche ponen la música a todo volumen y en cualquier parte de la población. Lo mismo ocurre con cualquier evento nocturno, los ruidos extremos están garantizados hasta las dos de la madrugada, pero lo peor son las discotecas al aire libre que sin permiso de apertura, sin medición acústica y con un volumen de sonido que machaca cualquier tímpano hasta las siete de la madrugada, están impunemente y con la permisibilidad de un ayuntamiento ignorante de las normas más elementales de civismo cachondeándose de gran parte de los vecinos de Mazagón.
De nada valen las denuncias y así llevan cinco años y cuando esto ocurre algo huele mal, ¿Connivencia? ¿favores? Todo es muy sospechoso. Los vecinos ya han llegado al límite y se avecinan cortes de carreteras y denuncias en instancias judiciales.
Lo más sorprendente es que el ayuntamiento de Moguer entiende esta actitud como una forma de atraer al turismo ¡Habráse visto mayor ignorancia!