Un vecino de Mazagón que se disponía a darse un baño en la playa de las "Casas de Bonares", zona a la que suele acudir con mucha frecuencia por su estado medio virgen y porque hay menos afluencia de gente, al bajar por uno de las pocos accesos que hasta ahora no estaba cerrado por una cancela; concretamente el de la última casa que tiene la solería de color marrón, una señora le salió al paso diciéndole que por ahí no se podía bajar porque era privado. Este vecino le dijo muy educadamente que no tenía conocimiento de ello y que siempre bajaba por allí para ir a la playa y nadie le había dicho nunca nada, es más, mientras le estaba echando la regañina había gente subiendo y bajando por la misma bajada y no les decía nada, como si nada...
Le comentó que tenia entendido que esta urbanización y los accesos eran públicos, a lo que la señora le respondió muy enfadada: «eso cómo va a ser, desde que empieza la calle es totalmente privado y los accesos a la playa por supuesto que también», y que la única manera de bajar a esa playa era por el acceso del hotel Solvasa o por la bajada a la playa de La Estrella. Este vecino le pidió disculpas y le comentó que iría a la policía para preguntar si verdaderamente estaba en lo cierto, por lo que la mujer se enfureció aún más.
Este incidente no es un caso aislado, ya que a lo largo del verano ha habido varios enfrentamientos entre usuarios de esta playa y vecinos de la zona. A nosotros nos cuesta trabajo creer que una urbanización donde se ha invertido mucho dinero público sea privada, y esa duda nuestra la comparten la mayoría de los mazagonenses. Alguien debería aclarar esta situación y poner orden.
