Comentábamos esta
tarde a la hora del café con dos amigos hosteleros lo desapacible que se
presentaba la tarde noche para los negocios, en un día en el que los recortes
habían llegado hasta al Desfile de las Fuerzas Armadas. Ambos esperaban poco de
la noche pero, como en la mejor de las películas del Oeste, ha llegado el 7º de
Caballería, cuanto menos para amenizar la charla y servir unos tentempiés a los
caballistas.
Federico Soubrier
Federico Soubrier