Fuente: Huelva Información
JESÚS RUIZ
En estos tiempos duros que nos ha
tocado vivir contamos, afortunadamente, con la solidaridad de mucha gente que
no dudan en dar un poco de sí misma para que los demás noten menos sus
carencias. Y otro ejemplo de esta ejemplar forma de entender la vida la encontramos
en Mazagón, donde José Prieto ha decidido que todos los martes acudan a comer
gratuitamente a su local Papas Bravas todos los africanos que frecuentan la
localidad costera, muchos de ellos dedicados a la venta ambulante.
"Comencé a hacerlo en diciembre, de cara a las Navidades, porque parece que es cuando más se nota la ausencia de la familia y las carencias más esenciales. Me daba pena ver a tantos de ellos solitarios, recorriendo el pueblo tratando de vender algo (muchas veces sin éxito) con lo que poder comer un plato caliente", nos cuenta Prieto, campeón de España de tiro con arco y deportista olímpico en 1984, en Los Ángeles. "Y luego, con la que está cayendo... Me pareció egoísta dejarlo sólo en un gesto navideño y decidí continuar. Me parece que es lo menos que podemos hacer, tratar de ayudar a los demás".
"La verdad es que agradezco
la ayuda que estoy recibiendo en esta iniciativa, pero lo seguiría haciendo
igualmente si no la tuviera", nos confiesa Prieto. "Es mayor la
satisfacción personal que recibimos por hacerlo que el gasto que nos supone y
mi hija y yo nos sentimos felices con esta acción solidaria y disfrutamos cada
martes viendo el gesto agradecido de tantas personas que apenas tienen. Y cuando
repiten nos reconforta viendo la fila que se forma delante de la cocina".
A las 14:00 comienzan a llegar los invitados, se van sentado en mesas de cuatro
y Pepe y su hija Diana empiezan a servir los primeros. "Nosotros les
servimos en la mesa, como hacemos a diario a los clientes, pero cuando acaban
se levantan a la cocina a repetir, algunos hasta tres veces. Y cuando acaban
todos de comer, esto es un espectáculo: se desviven para limpiar la terraza y
dejarla lista para el turno comercial", remata Prieto, quien no oculta que
"se me ponen los vellos de punta cuando veo las reacciones de esta
gente".
¿Y si un día se quedaran cortos en la preparación de la comida? "Siempre
quedan huevos con papas para salir del paso", ataja Prieto. El caso es que
la solidaridad se mantenga y entre todos pasemos el mal trago cuanto antes.