El accidente se produjo a causa
de las intensas rachas de viento cuando se dirigía a la rampa de la dársena
La embarcación se dirigía sobre
las 20.00 horas de ayer viernes a la rampa de la dársena, pero la fuerza del viento y el oleaje
la hicieron volcar justo en la misma bocana del puerto, arrastrándola hacia la
escollera. Los tripulantes —al parecer expertos navegantes—, no sufrieron
ningún daño y supieron afrontar esta difícil situación con la ayuda de varias
personas que rápidamente acudieron en su auxilio.
El rescate del velero no fue
fácil, ya que se había pegado a la escollera y hubo que luchar intensamente
para evitar el hundimiento. A las 21.00 horas el barco quedó atracado en un
pantalán del puerto donde se procedió a achicar el agua de la bañera. Los
daños del barco aún no se han evaluado, aunque parece que no revisten mucha
importancia.
La colaboración desde tierra fue
fundamental para su rescate