Aviones no tripulados en el hangar del INTA |
19 de diciembre
Ecologistas en Acción recurre al
Defensor del Pueblo andaluz por la indefensión ante la agresión ambiental que
supone el proyecto de los drones en Moguer (Huelva).
Ecologistas en Acción de Huelva
ha vuelto a presentar alegaciones a la nueva maniobra para apuntalar el apoyo
al proyecto Ceus para los drones en la comarca de Doñana, con la Autorización
ambiental unificada (A.U.U.) por parte de la Junta de Andalucía.
Además de incumplir la propia
normativa de ordenación del territorio de la Junta de Andalucía, el POTAD de
Doñana, y de saltarse la prohibición de darle un uso distinto al forestal a los
espacios que han sido objeto de las llamas en un tiempo inferior a 30 años,
según la vigente Ley de Montes, Ecologistas en Acción considera que en tiempos
de crisis no se deben destinar recursos públicos y medios naturales a probar
mecanismos para la guerra. A pesar de la publicidad contraria que se quiere
hacer al respecto, los drones patrocinados por el Ministerio de Defensa están
destinados a fines militares y bélicos, prácticamente en un cien por cien de
sus usos. Basta repasar las hemerotecas de las guerras de nuestro tiempo para
recordar que muchos de los daños y muertes de las mismas, vienen siendo
producidos por estos aviones no tripulados conocidos como drones. Esas
herramientas bélicas no deberían probarse en una zona de paz y símbolo de
concordia como es Doñana.
Desgraciadamente, la tramitación
del proyecto va avanzando, aunque todavía queda el veredicto final del
Ministerio de Medio Ambiente, que es el responsable de la emisión de la
declaración de impacto ambiental.
Ecologistas en Acción ha optado
también por presentar una queja ante el Defensor del Pueblo Andaluz, pidiendo
su intervención para exigir a la Junta de Andalucía que respete su propia
normativa, y no busque vericuetos y atajos para saltársela en el caso de los
drones, sólo con el interés de recabar una subvención europea . El frente común
en este caso entre varios Ministerios del Gobierno Central y la Junta de
Andalucía, provoca la indefensión de la naturaleza y la impotencia de la
participación ciudadana frente a las artimañas para saltarse la normativa que
protege esta zona del ámbito de Doñana.
Ecologistas en Acción