Alrededor de ochocientos espectadores han
disfrutado este fin de semana en Moguer del Festival Jazzymas, una gran apuesta
por el mestizaje musical que nos ha acercado a ritmos brasileños,
afroamericanos y andaluces a través de grandes virtuosos del panorama nacional.
Una gran fiesta cerró el sábado este ciclo de conciertos.
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| El mejor jazz se dio cita en Moguer |
Con el aplauso unánime del público se ha
clausurado en Moguer la edición ‘Cuna de Platero’ del Festival Jazzymas
organizado por KST Música en la ciudad del Nobel, como cierre de un circuito de
seis microfestivales que ha recorrido durante los últimos meses distintos
puntos de la provincia de Huelva.
La cita moguereña ha contado con el
respaldo de alrededor de ochocientas personas, que han podido disfrutar en el
teatro Felipe Godínez de artistas consagrados en el mundo del jazz y de otros
que emergen con gran fuerza imprimiendo como grupo un sello muy personal. Un
total de tres recitales se han programa en la localidad con la colaboración del
Ayuntamiento, la Diputación de
Huelva y la Junta de Andalucía, con el objetivo de contribuir
a la proyección de este tipo de música y de sus intérpretes.
La última sesión de este Festival Jazzymas
en Moguer tuvo lugar en la noche del sábado con una gran fiesta dedicada al
blues en la que participó uno de los músicos más prestigiosos de nuestro país,
Mingo Balaguer, líder de un cuarteto que conquistó a los espectadores no sólo
por su calidad, sino por la pasión, la vitalidad y los sentimientos que pusieron
en todo momento sobre el escenario. Este amor por el blues quedó de manifiesto
también en el concierto ofrecido por la banda ‘Q & The Moonstones’ del
guitarrista onubense Quique Bonal, miembro también de la anterior agrupación,
que junto a Vicky Luna interpretaron un repertorio de temas propios y versiones
en los que alternaron el swing, el soul y por supuesto el jazz clásico.
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| Gran acogida del público |
Si esto ocurría el sábado, el viernes la
cita fue igualmente especial con el gran intérprete y compositor Jorge Pardo,
uno de las figuras del jazz español con más proyección internacional, que hizo
vibrar a los espectadores con un especial mestizaje entre el jazz y el
flamenco, que le ha permitido ser autor de un lenguaje musical propio que lo
convierte en un modelo de referencia.
A estos grandes del panorama nacional, se
unió el jueves como plato inaugural la joven agrupación onubense Casa Do Samba
que está conquistando los escenarios andaluces con una personalidad elegante y
callejera basada en los ritmos brasileños. La singular adaptación que realizan
de la música carioca, manteniendo sus señas de identidad, les está reportando
grandes momentos de conexión con el público y de reconocimiento de la crítica,
del que pudieron dar buena cuenta los numerosos aficionados y aficionadas que disfrutaron
con su actuación.
En resumen, un exitoso ciclo musical en
torno a una música tan emotiva y vibrante como el jazz, que ha permitido a
moguereños y amantes de este estilo tan singular, disfrutar de algunos de los
mejores intérpretes nacionales del momento, en un gran escenario como el Felipe
Godínez y a precios verdaderamente asequibles para todos los públicos.