La masificación del puerto obliga a los barcos a abarloarse haste en tres o cuatro filas |
La Agencia
Pública Puertos de Andalucía, propietaria del puerto deportivo de Mazagón fue
siempre contraria a la utilización de este puerto por parte de los pescadores
de Mazagón y Palos, argumentando que las operaciones pesqueras limitan el
desarrollo de un puerto concebido como instalación específicamente recreativa, impidiendo
potenciar el turismo en la localidad.
Ante la
continua presión de los pescadores reivindicando la utilización de este puerto,
la Agencia Pública Puertos de Andalucía cede y firma un convenio en julio de
1996, permitiendo el uso provisional y, un tanto marginal, de estos pescadores en
el muelle adosado al dique de abrigo. Unos años más tarde, en enero de 2001, una
resolución de la Dirección General de Pesca y Acuicultura, publicada el 12 de
septiembre 2012 en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía Nº. 179, autoriza la descarga de pescado en el muelle
del dique de este puerto.
La Agencia
Pública Puertos de Andalucía ha reconocido este año que la actividad que más
empleo genera en los puertos es la pesquera, y por tanto, considera
imprescindible su apoyo y promoción mejorando sus instalaciones. Y así se
recoge en el borrador del Plan de Puertos 2014-2020 que la Consejería de
Fomento y Vivienda, de la que depende Puertos de Andalucía, presentó en
Huelva el pasado mes de junio a los colectivos interesados. Este borrador
contempla varias actuaciones para el puerto de Mazagón, entre las que se
encuentran nuevas zonas de fondeo, adaptación del muelle, ampliando la zona de
descarga, y la construcción de cuartos de redes —actualmente en construcción—,
una vieja reivindicación de los pescadores.
Pescadores cosiendo redes en el puerto de Mazagón |
Desde hace
algunas semanas toda la zona del dique de abrigo está dedicada a las faenas del
sector pesquero, a excepción de un espacio reservado a la Inspección Pesquera,
Salvamento Marítimo y otros profesionales del puerto, permitiendo pues, el
atraque de todos los barcos pesqueros.
El elevado
precio del combustible, uno de los mayores problemas que afectan a este sector,
y que supone el 80% del gasto total de un barco, obliga a las flotas pesqueras
de otros puertos del litoral onubense a utilizar el puerto de Mazagón para
ahorrar combustible y hacer sostenible su actividad. Esto ha traído consigo la
masificación del puerto, que no tiene atraques suficientes para todos los
barcos, teniéndose que abarloar hasta en tres o cuatro filas, ocasionando
problemas para la descarga e impidiendo a los que quedan por la parte interior salir
a faenar cuando lo deseen. Esta situación ha provocado un lógico malestar entre
los pescadores de Mazagón y Palos, que después de tantos años luchando para
conseguir un auténtico puerto pesquero, ahora se encuentran que al llegar al
puerto no tienen atraque. «Estamos peor
que antes, esto no hay quien lo aguante. Cuando llegamos al puerto nos tenemos
que abarloar a otos barcos para poder descargar. Este puerto no tiene
infraestructura para tantos barcos», comenta muy indignado un pescador de
Palos.
Como esta
nueva actividad del puerto de Mazagón exige un control de las capturas que se
descargan, la Policía Portuaria ha instalado un módulo portátil en la entrada a
la zona de atraques, desde donde ejerce un “control” del tráfico de pescado que
sale hacia la lonja de Huelva. Por un lado los agentes controlan el peso del pescado
que sale, ya que la tarifa del atraque
va en función del peso de las capturas; y por otro lado se encargan de emitir
el obligado documento denominado “Conduce”, un carné de identidad del pescado
para poder ser transportado a la lonja.
Este proceso
de adaptación por el que está pasando el puerto conlleva cierto desorden y
algunas situaciones incómodas entre pescadores y transportistas, pero es bien
seguro que dentro de poco todo se normalizará y Mazagón tendrá el puerto
pesquero que todos deseaban.