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01 diciembre, 2014

El médico de Juan Ramón protagonista del Documento del Mes de diciembre

El doctor Luis López Rueda, quien fuera médico de la familia Jiménez y gran confidente del premio Nobel moguereño, es el protagonista del Documento del Mes que se ha presentado esta mañana en el Archivo Histórico Municipal de Moguer. Varios de los descendientes del galeno asistieron al acto.
Los documentos se exponen este mes
La concejala de Cultura Lourdes Garrido y el director del Archivo Histórico moguereño, Diego Ropero-Regidor, han presentado esta mañana el Documento del Mes de Diciembre que podrá admirarse hasta finales del presente año en la sala de consultas de la institución cultural, y que está dedicado al que fuera gran amigo y confidente de Juan Ramón Jiménez, el doctor Luis López Rueda. Este facultativo fue médico personal de la familia del Nobel con la que además mantuvo lazos de parentesco al casarse con Manuela Jiménez Rengel, siendo la primera hija del matrimonio también llamada Manuela, ahijada del Andaluz Universal.
Luis López Rueda obtuvo en la Universidad de Sevilla la Licenciatura en Medicina y Cirugía, carrera que va a ejercer en Moguer como médico particular y titular de la Beneficencia y Asistencia Pública Domiciliaria, una responsabilidad a la que se suman años más tarde los cargos de Subdelegado de Medicina del Partido, Inspector Municipal de Sanidad de Moguer y Médico de Sanidad del Puerto de Huelva. Falleció en su casa de la calle Burgos y Mazo el día 31 de julio de 1941 a la edad de sesenta y seis años.

Detalle de algunos documentos
Durante el periodo que Juan Ramón pasó en Moguer entre1905 a 1912, el poeta le acompañaba para hacer las visitas a los enfermos del pueblo como recuerda el propio Nobel en una conversación mantenida con Ricardo Gullón en la que el poeta afirma: “Empecé a escribir Platero hacia 1906, a mi vuelta a Moguer, después de haber vivido dos años con el jeneroso Doctor Simarro. El recuerdo de otro Moguer unido a la presencia del nuevo y mi nuevo conocimiento del campo y de la jente, determinó el libro. Entonces yo iba mucho por el pueblo con mi médico Luis López Rueda y vi muchas cosas tristes”.
Este elocuente comentario sobre la relación que el poeta mantuvo con su médico se completa con las alusiones al doctor que Juan Ramón hace en Platero y yo. Así en el capítulo XXXVI ‘Las tres viejas’ el poeta escribe “Debe venir de la playa o de los montes. Mira. Una es ciega y las otras dos la traen por los brazos. Vendrán a ver a don Luis, el médico, o al hospital…” Y en el capítulo LXI ‘La perra parida’: “Parió cuatro perritos, y Salud, la lechera, se los llevó a su choza de las Madres, porque se le estaba muriendo un niño, y don Luis le había dicho que le diera caldo de perritos.”
En ambas descripciones, Juan Ramón destaca la cruda realidad de los pobres en una época en que las diferencias sociales y las carencias materiales de muchas familias aún formaban parte del paisaje.
La figura del doctor Luís López Rueda es reivindicada así en este emblemático Año Platero, ocupando ese lugar destacado en el archivo histórico municipal, donde el público podrá admirar documentos centenarios tan significativos como su solicitud para la plaza vacante de médico de la Beneficencia, una comunicación de la Junta de Gobierno y Patronato de Médicos Titulares con el nombramiento de Luis López Rueda como médico titular de esta localidad, o una solicitud del propio facultativo al Ayuntamiento moguereño para que se abonen quinquenios en el ejercicio de su profesión. Además pueden admirarse también interesantes fotografías como la que nos muestra a Juan Ramón con Luis López Rueda y sus hijas en el exterior de la parroquia de Almonte, en un viaje al Rocío, una imagen del médico en la azotea de su casa de la calle Burgos y Mazo con vista a la plaza del Cabildo, y una foto de estudio del gran doctor y amigo personal del poeta, varios de cuyos descendientes asistieron también al acto de homenaje tributado esta mañana en el archivo moguereño