Sus Majestades los Reyes de
Oriente han repartido en su recorrido por las calles de Mazagón un derroche de magia,
ilusión y fantasía entre los niños de esta localidad, compartido también entre
los adultos que han recuperado por unas horas la inocencia de estos niños.
La cabalgata se vio deslucida
por la densa neblina que hizo presencia a primeras horas de la tarde, además de
una avería en una de las carrozas en la Avenida del Parador, que retrasó la
llegada al edificio de la Mancomunidad, donde todos los asistentes fueron agasajados
con una lluvia de regalos desde los balcones de este edificio.
José Antonio Mayo Abargues