Cientos
de pequeños y mayores disfrutaron el pasado viernes del tradicional acto de la
quema de la ballena con el que se cerraba el Carnaval en Mazagón. Tras
suspenderse la semana anterior por el mal tiempo, vecinos y visitantes
participaron en este multitudinario acto en el que son destacados protagonistas
los más pequeños.
El patio del colegio El
Faro fue como cada año el punto de partida de la quema de la ballena, que se realizó
tras la tradicional chocolatada que organiza la Ampa del centro educativo,
cuyos alumnos y alumnas son los que más disfrutan de esta iniciativa que ponen
en marcha cada año el propio colegio y la asociación de vecinos de Mazagón.
Junto a gran cantidad
de pequeños disfrazados, también muchas personas mayores se sumaron a la
iniciativa, y participaron en el desfile festivo hasta la playa de las Dunas,
donde se procedió a la quema de las dos ballenas que se confeccionan cada año,
una mamá ballena y su pequeña cría realizadas con madera, papel y cartón, que
fueron portadas por los propios chavales con el apoyo de miembros de la
organización, entre los que se encontraba el concejal del Ayuntamiento de Moguer
en Mazagón, Paco Martínez.
Una animada charanga
puso el ritmo al multitudinario desfile de los dos cetáceos, arropados por
cientos de personas entre las que predominaban sin duda los niños, pero entre
las que también se encontraban muchos adultos disfrazados que vivieron una
tarde inolvidable en la que incluso el tiempo dio una tregua.
Tras recorrer algunas
calles del centro de la localidad, y ya con las últimas luces del día, las
ballenas llegaron a la playa de Las Dunas, donde se procedió a la quema de las
figuras a las que rodeaban cientos de personas que acudieron a disfrutar del
colorido de este acto que llenó de destellos de magia y alegría la tarde
carnavalera de Mazagón.
Los más pequeños fueron
los verdaderos protagonistas de esta fiesta popular que cada año cuenta con una
mayor afluencia de vecinos y visitantes.