En
el año 1962, nueve arriesgados navegantes partieron de La Rábida (Palos de la
Frontera. Huelva) para emular el viaje de Colón a América en la carabela “Niña
II”, una nave construida a semejanza de las carabelas del Gran Almirante.
La
aventura no estaba exenta de riesgos, aunque a bordo de aquella nave iban nueve
hombres cargados de coraje y valentía. Entre ellos, José Ferrer Robles, “Rompejato”,
un palermo con la audacia y valentía de sus vecinos de fines del siglo XV.