El director general de
Coordinación de Políticas Migratorias de la Junta, Luis Vargas, ha estado hoy
en nuestro municipio durante su visita a varias localidades onubenses con
grandes zonas de producción agrícola, en las que el fenómeno de la inmigración tiene
una mayor presencia.
Acompañado por el
delegado del Gobierno Andaluz, Francisco José Romero, Vargas ha mantenido una
reunión de trabajo con el alcalde Gustavo Cuéllar, la concejala de Bienestar
Social, Paqui Griñolo y varios técnicos de este área municipal que trabajan en
estrecho contacto con la situación de los inmigrantes en el municipio, al
objeto de conocer en profundidad la realidad de este colectivo para intentar
promover actuaciones que favorezcan su integración sociolaboral y minimicen el
impacto negativo que hasta ahora tienen los asentamientos chabolistas que
siguen detectándose en el entorno de las zonas freseras de la provincia.
Antes, el director
general de la Junta había mantenido contactos tanto con representantes de la
Unión de Pequeños Agricultores, UPA, como con entidades sociales que trabajan
en relación con la situación de estos asentamientos, como Accem, visitando
incluso algunos de estos parajes en los que persiste el fenómeno de las
concentraciones chabolistas.
Durante la reunión de
trabajo tanto los representantes municipales como los de la Junta de Andalucía
coincidieron en la necesidad de articular políticas y mecanismos de atención
social en los que se involucren decididamente las tres principales
administraciones implicadas, como son los ayuntamientos, la Junta y el gobierno
central.
El alcalde Gustavo
Cuéllar destacó “el esfuerzo que el consistorio moguereño viene realizando
desde hace años potenciando el servicio de atención al colectivo inmigrante, y
poniendo en marcha un protocolo para la eliminación de estos asentamientos
tercermundistas y con graves problemas de salubridad y seguridad para sus
propios ocupantes y también para el medio natural que son los asentamientos”.
En este sentido Cuéllar
recalcó que “mediante una actuación que incluye labores de información y
concienciación, asesoramiento sobre alternativas de alojamiento y trabajo, y
atención a las necesidades básicas de las personas migradas en nuestro
municipio, se ha conseguido reducir el número de inmigrantes ubicados en estos
precarios asentamientos de unas 1500 el pasado año a poco más de 400 en la
actualidad”.
El director general de
Políticas Migratorias destacó “la necesidad de abordar la situación de estos
asentamientos vinculados a las explotaciones agrícolas mediante una estrategia
conjunta de las tres administraciones y la colaboración de todos los sectores
implicados”, insistiendo en que “se trata de un problema acumulado durante
muchos años que hemos de intentar solucionar a través de una intervención sobre
este colectivo que debe aunar una acción social y pedagógica sobre los
residentes en estos asentamientos, y una búsqueda de alternativas que permita a
todas estas personas disponer de una vivienda digna”.
Vargas añadió que “es
necesario por una lado fomentar la consolidación de alojamientos adecuados en
las propias fincas agrícolas, y por otro facilitar el acceso a viviendas de
alquiler, dando siempre tranquilidad a los arrendadores con garantías de que
percibirán sus rentas, y realizar además un seguimiento cercano de estas
personas para lograr una integración cada vez mayor en nuestra sociedad”.
Por su parte la
concejala Paqui Griñolo destacó “que el Ayuntamiento de Moguer lleva 5 años
trabajando seriamente en la búsqueda de soluciones para esta situación siendo
incluso pioneros en la puesta en marcha de protocolos para evitar estos
asentamientos chabolistas”, y agradeció a Vargas “la complicidad y el apoyo de
la Junta de Andalucía en esta difícil tarea que solo podremos abordar con
garantías si nos implicamos en ello todas las administraciones”.
La responsable
municipal de Bienestar Social se mostró de acuerdo con Vargas en la necesidad
“de involucrar de manera directa al Ministerio en estas acciones solidarias y
de integración social ya que sólo con la implicación de todos los actores
podremos recuperar la dignidad para todas estas personas que malviven en estos
asentamientos en condiciones verdaderamente duras”.
Por último, Griñolo
destacó “el carácter acogedor que Moguer siempre ha tenido hacia las personas
migrantes sin que se haya detectado nunca un brote xenófobo en nuestra ciudad,
y vamos a seguir trabajando con todos los medios a nuestro alcance por
conseguir una sociedad cada vez más cohesionada y más solidaria”.