El Ayuntamiento de
Moguer y la Real Sociedad Colombina Onubense celebraron ayer el 524 aniversario
del regreso de la Niña a la ciudad del Tinto, y del cumplimiento del voto colombino
de Santa Clara. Alumnos del colegio Pedro Alonso Niño escenificaron lo que
supuso para la ciudad el regreso de su carabela.
La iglesia conventual
donde Cristóbal Colón pasó la noche del 15 al 16 de marzo de 1493 dando gracias
por el feliz desenlace de la aventura, tras sorprender una gran tempestad a las
naves que traían la noticia del descubrimiento, fue también escenario en la
tarde de ayer de la rememoración de aquella promesa realizada por el marino
genovés.
Una amplia
representación de la corporación local encabezada por el alcalde Gustavo
Cuéllar, la directiva de la Colombina presidida ayer por su vicepresidente
Miguel Ángel Esteve, la subdelegada del gobierno Mª Asunción Grávalos,
representantes de los Ayuntamientos de Palos de la Frontera y Huelva, y mandos
y jefes militares tanto del Ejército de Tierra, como de la Armada, la Guardia
Civil o las Policías Autonómica y Local, junto a vecinos y vecinas de la
ciudad, se dieron cita en el monasterio colombino para asistir al solemne
aniversario de uno de los grandes acontecimientos de la historia moguereña.
El alcalde de Moguer
Gustavo Cuéllar abrió el acto destacando la decisiva participación de la ciudad
de los Niño en la gran aventura descubridora, y ensalzó la figura del piloto
mayor de la flotilla colombina, Pedro Alonso Niño, al que definió “como el
verdadero responsable técnico del descubrimiento”.
Posteriormente el
secretario de la Real Sociedad Colombina Eugenio Toro dio lectura al diario de
a bordo en el que se relata con todo detalle aquel episodio vivido por las
carabelas Pinta y Niña durante la gran tormenta que amenazaba con hundir las
naves en el tornaviaje, y cómo quiso la suerte que fuese el propio Cristóbal
Colón el elegido para cumplir la promesa de pasar “una noche en vela y oración
ante el altar de Santa Clara de Moguer.”, lo que el genovés cumplió la misma
noche de su arribada al puerto de la ribera del Tinto.
A continuación el
alcalde moguereño y el vicepresidente de la Colombina ---- portaron el cirio
votivo que recuerda la estancia de Colón en Santa Clara hasta colocarlo bajo la
lápida que recuerda aquellos hechos que tuvieron lugar entre los muros del
monasterio 524 años antes.
Concluida la
rememoración del voto colombino, las autoridades encabezadas por Cuéllar y
Esteve compusieron una comitiva que se encaminó hacia el monumento a Colón y a
los descubridores moguereños, donde depositaron una corona de laurel como
recuero y homenaje.
ESCENIFICACIÓN DE LA
ARRIBADA
Como colofón a las
actividades, en el refectorio de Santa Clara medio centenar de alumnos y
alumnas del colegio Pedro Alonso Niño, escenificaron ataviados con trajes de la
época colombina cómo se recibió en la villa marinera la noticia del
descubrimiento de las nuevas tierras. Artesanos, campesinos, marineros o monjas
clarisas del convento a los que daban vida los pequeños intérpretes,
representaron lo que supuso para el Moguer de finales del siglo XV el regreso
de la carabela Niña tras el descubrimiento, y el modo en el que sus navegantes
fueron recibidos por la población local más de 7 meses después de su partida.
Como agradecimiento por
su participación en el acto, el alcalde Gustavo Cuéllar y la concejala de
Educación Paqui Griñolo, entregaron a todos los intervinientes un ejemplar de
libro “Moguer en diario de un poeta reciencasado”.