Bienvenida del concejal. |
En estos días en los
que celebramos el 524 aniversario del regreso de las naves descubridoras, el
Archivo Histórico de Moguer nos presenta como Documento del Mes el testamento
de uno de los testigos del primer viaje colombino, el clérigo Alonso Durán que
vivió en primera persona aquellos acontecimientos.
Años después del
descubrimiento del Nuevo Mundo fueron muchos los testigos que declararon en los
Pleitos Colombinos que enfrentaron los intereses de la familia del Almirante,
empeñada en hacer valer las prerrogativas concedidas al descubridor por los
Reyes Católicos, ante una Corona que accedía solo en parte a sus
requerimientos.
Así en Moguer, Palos,
Santo Domingo, y en otras poblaciones, declararon en distintos pleitos personas
que habían participado en el viaje descubridor o fueron testigos de los
momentos previos a la expedición y del posterior regreso de la carabela Niña,
entre ellos, vecinos y marineros que intervinieron en las probanzas de los
hermanos Niño donde también se exponen los méritos y servicios de Pedro Alonso
Niño, piloto mayor de la flotilla colombina y verdadero responsable técnico del
descubrimiento.
Detalle del testamento de Alonso Durán . |
El documento del mes
que han presentado esta mañana el director del Archivo Histórico de Moguer,
Diego Ropero y el concejal moguereño José Manuel Alfaro, saca a la luz a uno de
los testigos de la probanza realizada en Moguer en 1557, presentada por el hijo
del piloto Pedro Alonso Niño, el también navegante Francisco Niño. Esta demanda
tuvo su continuación años más tarde por parte de su nieto Pedro Niño desde la
ciudad de Tunja, en la actual Colombia, donde varios descendientes de los
navegantes moguereños se asentaron y residieron durante los siglos posteriores.
El personaje en
cuestión es Alonso Durán, clérigo presbítero de la iglesia parroquial de
Moguer, quien el 16 de mayo de 1559 otorgó su testamento, una pieza clave que
nos informa sobre sus bienes y su familia.
En la probanza de 1557
Durán declara que vio nacer, conoció y trató a Francisco Niño y a sus padres
Leonor de Boria y Pedro Alonso Niño, “por ser vecino de los susodichos con su
casa morada en la calle de la Ribera”. Alonso Durán afirma que también fue
testigo del casamiento en la iglesia mayor de Francisco Niño e Isabel González
la Caballera, y que, aunque entonces apenas tenía diez o doce años, se acuerda
que Pedro Alonso Niño y sus hermanos partieron de Moguer en compañía de Colón
para las Indias y “así mismo sabe que de esta ida descubrieron las Indias y
regresó a esta villa después de haberlas descubierto”.
En este 2017 en el que
celebramos el Encuentro entre Dos Mundos, Moguer se destaca como una de las
localidades más decisivas en la organización y realización del primer viaje
colombino, y el papel de sus navegantes, encabezados por el piloto mayor de la
flotilla, Pedro Alonso Niño, se revela
como esencial en el éxito de esta gran aventura para la humanidad.