Alcalde, delegado de Educación y director del colegio. |
El colegio Zenobia ha
vuelto a sorprendernos con una cuidada y deliciosa publicación dedicada este
año al arte de la escritura y la lectura en el centenario de ‘Diario de un
poeta recién casado’. El alcalde Gustavo Cuéllar y el director del centro
Rafael Cruzado presidieron este encuentro literario en el teatro Felipe Godínez.
El estudio que los
escolares han realizado del maravilloso mundo de las letras ha dado como
resultado la publicación del libro ‘Tú escribes...yo leo’, un proyecto lleno de
vida, de sueños y esperanzas que convierte al Zenobia en referente educativo,
tal es así que no han faltado a la cita ni el delegado de Educación Vicente
Zarza ni la jefa de servicio de Ordenación Educativa de la misma delegación,
Rosario Romeu.
Para ponerlo en marcha
el alumnado ha contado con la ayuda de veinte escritores y escritoras locales
que han visitado las aulas para intentar que germine en todos ellos el gusto
por la literatura.
Especialmente emotiva
ha sido esta edición para el director del Zenobia Rafael Cruzado, por ser la
última. Dice adiós a su etapa como docente pero no a su sueño de seguir
construyendo una sociedad que tenga como pilares fundamentales la educación y
la formación en valores. Fueron muchas las muestras de cariño y admiración que
Cruzado recibió ayer en la puesta de largo de un proyecto didáctico por el que
siente verdadera pasión.
Foto de familia con los escritores que han colaborado. |
También fueron testigos
de la presentación de la obra, maquetada por el moguereño Miguel Rodríguez, la
concejala de Educación Paqui Griñolo y la directora del Centro del Profesorado
Bollullos-Valverde, Manuela Avilés.
El acto, que se enmarca
en la celebración de las XVIII Jornadas de Animación a la Lectoescritura, se
cerró en la casa natal de Juan Ramón Jiménez con la inauguración de la
exposición que aglutina los trabajos realizados por el alumnado del centro.
En un pueblo como
Moguer, cuna del más grande poeta lírico en habla hispana, este colegio intenta
de alguna manera sembrar en la infancia y en la juventud moguereña el gusto por
la lectura y la escritura, un gusto que forma parte ya del ADN del colegio
Zenobia, al que damos la enhorabuena por el gran trabajo realizado.