Juana Gallardo, María Alza, Rafael Cruzado, Alonso Ruiz y los hermanos Miguel, Manolo y José María Garrido recibieron ayer el aplauso unánime de su pueblo en la IV Gala ‘Arte de vivir’ que organiza la concejalía de Bienestar Social y Mayores.
El alcalde Gustavo Cuéllar y la concejala Paqui Griñolo presidieron el acto acompañado por varios miembros del equipo de gobierno, que no quisieron faltar a esta gran fiesta preparada de manera especial para un grupo de moguereños y moguereñas que merecen en esta etapa de sus vidas un reconocimiento a su trayectoria personal y profesional.
La gala empezó con mucho ritmo, el que marcó el grupo de bailes de salón de la asociación Andaluz Universal que dirige Cristóbal Molina y que nos mostró sobre las tablas del Felipe Godínez lo mucho que han aprendido en clase.
Con todos los homenajeados en sus asientos comenzaba el primer reconocimiento de la noche. Juana Gallardo escuchaba su nombre en el patío de butaca y subía emocionada a recibir este merecido aplauso por su infinita capacidad de trabajo, por su espíritu emprendedor y por su compromiso con la vida socio-cultural de Mazagón.
Llegaba el turno de María Alza, una moguereña que se ha convertido en ejemplo de lucha y superación, una mujer generosa y solidaria que junto a otras familias fundó la asociación Abriendo Puertas que trabaja de forma incansable por la integración socio-laboral de jóvenes especiales.
Era el turno ahora de rendir homenaje a un sorprendido Rafael Cruzado, un hombre ligado con mayúsculas al mundo de la cultura y la educación, que ha dedicado buena parte de su vida a hacer de Moguer un pueblo mejor formado y más rico en valores.
También pudo sentir el calor de sus vecinos y el orgullo de sus familiares Alonso Ruiz, un moguereño que siempre ha presumido de sus raíces; tal es así que cuando consiguió hacer realidad el sueño de su vida, tener su propia bodega en Jerez, tuvo muy claro que su pueblo tenía que estar presente, de ahí que la bautizara como Urium, nombre que los romanos le dieron a Moguer.
La IV Gala ‘Arte de Vivir’ se cerraba con el homenaje a los hermanos Miguel, Manolo y José Mª Garrido, empresarios agrícolas, que por su arrojo, capacidad de lucha y liderazgo contribuyeron revalorizar el principal motor económico de nuestra localidad. Especialmente emotivo fue el recuerdo a Manolo La Cana, representado en el acto por su hija Lauri que dedicó a su padre unas hermosas palabras.
La guinda perfecta a esta entrañable velada la puso el dúo Palo Dulce Flamenco. Las hermanas Cecilia y Rocío González nos hicieron vibrar con la pureza y el embrujo de su voz.
Ayuntamiento Moguer
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