Ayer se inauguró la nueva sede del Centro Municipal de
Información a la Mujer (CMIM), que gozará ahora de mayor independencia y
privacidad gracias al esfuerzo que ha realizado el Ayuntamiento de Moguer para
hacer efectivo su traslado desde el edificio de Asuntos Sociales hasta las
antiguas dependencias de la Jefatura de la Policía Local.
Este servicio público de atención a la mujer cumple 25 años y
lo hace con la firme convicción de seguir luchando por los derechos
fundamentales de la mujer, para construir una sociedad más justa e igualitaria
en la que impere el principio de igualdad de oportunidades.
El alcalde de Moguer Gustavo Cuéllar presidió el acto
inaugural acompañado por la directora del Instituto Andaluz de la Mujer Elena
Ruiz, la vicepresidenta de Diputación Mª Eugenia Limón y la concejala de
Igualdad Pilar Rodríguez, y junto al presidente de la Mancomunidad Condado de
Huelva Juan Antonio García y la coordinadora provincial del IAM Eva Salazar.
Al acto inaugural acudieron también varios miembros del
equipo de gobierno local y las asociaciones de mujeres del Condado de Huelva,
representadas por 100 luchadoras que salieron en su día a la calle para
reivindicar un sitio en la sociedad, como también lo hicieron y lo siguen
haciendo las asociaciones de mujeres de Moguer y Mazagón, a las que el alcalde
les cedió el testigo para que fueran ellas, como grandes tejedoras del
principio de igualdad, las técnicas del CMIM y las concejalas del Ayuntamiento
las que inauguran la nueva sede.
En este renovado centro de atención a la mujer, las usuarias
seguirán recibiendo asesoramiento jurídico, apoyo psicológico y atención
personalizada para realizar todo tipo de gestiones administrativas. Se ofrecen
los mismos servicios que su anterior emplazamiento, pero con mayor garantía de
privacidad por la delicadeza de muchos de los asuntos que se tratan.
Gran afluencia de público. |
En cuanto a la distribución interior del centro es importante
destacar que se ha respetado el diseño originario. La antigüedad del edificio
del ayuntamiento impide que se hagan modificaciones urbanísticas, y la escalera
que podía verse como un obstáculo al final la concejalía de Igualdad ha
conseguido darle la vuelta y lo ha convertido en un espacio de positividad,
para las mujeres que entre en el centro en busca de ayuda sientan el aliento y
el apoyo de las trabajadoras a través de los mensajes que rezan en cada uno de
sus escalones.
Las nuevas dependencias disponen de varios despachos de
atención al público en la planta baja, de una sala de espera y una oficina de
asesoramiento jurídico en la planta alta. En todas ellas el morado se convierte
en el nexo de unión de un centro que seguirá luchando por los derechos de la
mujer, por la igualdad de oportunidades y por dar voz a todas mujeres a las que
se les ha arrebatado la posibilidad de vivir con dignidad.