Operarios municipales están
procediendo al reparto de garrafas para el reciclaje de los aceites domesticados usados
Bajo el lema “Reciclar no es tu
obligación, es tu responsabilidad” comienza una nueva campaña de reciclaje del
Ayuntamiento de Palos de la Frontera.
Esta iniciativa, recogida dentro de su nuevo plan municipal, se centra
especialmente en el conjunto de medidas y actuaciones que tienen como objetivo
informar a los palermos sobre los métodos correctos de reciclaje de envases
ligeros, vidrio, papel y cartón y aceites usados.
Durante estos días, operarios del
servicio de limpieza están procediendo al reparto, casa por casa, de garrafas
con capacidad de cinco litros para que los usuarios puedan almacenar en ellas
aceites domésticos usados. Una vez llenas y tal como se explica en el folleto
informativo que las acompaña, el vecino tendrá que avisar en el Servicio de
Atención al Ciudadano para solicitar su recogida. Cada semana, a primera hora
del jueves trabajadores municipales las recogerán para llevarlas a una planta
de tratamiento y la repondrán para que el vecino pueda seguir reciclando.
“Es fundamental que la población
tenga conciencia medioambiental, que sean conscientes de la importancia de
pequeños gestos como este para el futuro de nuestro planeta”, señalaba Carmelo
Romero, alcalde de Palos de la Frontera.
El aceite usado es reciclable
y puede dar vida a otros muchos materiales. Se recicla el aceite vegetal
sobrante de asados, fritos, alimentos enlatados, manteca de cerdo o grasas
caducadas y en mal estado. Hay que prestar atención en no mezclarlo con aceites
de motor o grasas industriales.
Una vez se recoge el aceite
acumulado, se traslada a centros de transferencia, donde se determina su
composición y se destila para eliminar el agua, sedimentos y otro tipo de
impropios. Los usos que se le puede dar al aceite reciclado son muy diversos,
desde biocombustibles
para motores Diesel a otras muchas salidas como abonos, ceras, barnices,
cremas, detergentes, lociones y jabones.
Un litro de aceite domestico
puede contaminar mil litro de agua. Si se tiran por el desagüe, estos se
adhieren a las paredes, provocando atascos en las tuberías y generando malos
olores. Trabajar por un Palos de la Frontera más sostenible medioambientalmente
es una responsabilidad de todos.