El Coordinador
Provincial de Izquierda Unida en Huelva, Rafael Sánchez Rufo, traslada
públicamente “el reconocimiento de nuestra organización a las y los
sindicalistas, y a las trabajadoras y trabajadores con conciencia de clase que
durante estos días están defendiendo los derechos de sus compañeras y
compañeros que tienen que seguir yendo a sus puestos de trabajo”.
Izquierda
Unida en Huelva reconoce que en estos momentos, en los que toda la sociedad
está luchando colectivamente contra la propagación del coronavirus, no podemos
olividarnos de las personas más vulnerables, entre las que están las
trabajadoras y trabajadores que siguen en sus puestos de trabajo, y las
personas que están perdiendo sus trabajos o viendo sus derechos mermados. Ahí,
“ayudándoles y apoyándoles” para que puedan benefiiciarse de las medidas laborales y económicas del gobierno y
reivindicando nuevas medidas para que no pierdan sus derechos, están trabajando
las y los sindicalistas de las diferentes centrales sindicales, además de
trabajadoras y trabajadores “valientes y con conciencia de clase”. Estos
activistas sindicales que defienden a sus compañeras y compañeros hacen frente
a diario a las injusticias que se puedan estar cometiendo contra las personas
que no pueden defenderse por si mismas, debido a las condiciones de precariedad
laboral en las que se encuentran.
Al mismo
tiempo que toda la sociedad es consciente de que el Estado debe contar con unos
servicios sanitarios y públicos fuertes, con recursos suficentes para atender a
toda la población, “también debemos reconocer la labor solidaria de los
sindicatos, junto con las trabajadoras y trabajadores que luchan por sus
derechos allí donde éstos no están implantados”, para hacer que la mayor parte
de la población tenga acceso a los derechos laborales que en tiempos de crisis
como estos se ven afectados.
Una salida
desde la justicia social a la crisis económica y social que se deriva de esta
crisis sanitaria “necesita del fortalecimiento de la capacidad de organización
de la clase trabajadora y el papel del sindicalismo de clase es imprescindible
para ello”, precisa Sánchez Rufo.