IU defiende el incremento de las ayudas a estos sectores que son los “más perjudicados por las restricciones horarias y la limitación de desplazamientos” con la aplicación de reducciones fiscales, asesoramiento para aprovechar los nuevos canales de comercialización digital, campañas de promoción y reducir las ventajas competitivas en horarias concedidas a las grandes superficies comerciales.
 |
| Mercado del Carmen (Huelva) |
Izquierda Unida en Huelva propone la
puesta en marcha de un plan coordinado entre todas las administraciones, en el
que se aúnen todos los esfuerzos institucionales dirigidos a salvar empleos y
apoyar “contundentemente” a los sectores de la hostelería, el pequeño comercio
y las pymes, cuya “ya debilitada” situación se está agravando por las
restricciones de horarios aplicadas por la Junta de Andalucía para frenar la
extensión de la pandemia. Izquierda Unida añade que para ello debe contarse con
la cooperación y participación de las organizaciones que representan a estos
sectores, incluyendo las plataformas creadas en defensa de los mismos y las
entidades de economía social y solidaria.
Para ello, Izquierda Unida defenderá iniciativas al respecto con las que reclamará a la Junta de Andalucía que impulse estos planes de apoyo, convocando a los representantes de este sector económico fundamental y sobre el que está pesando especialmente las consecuencias de la crisis del Covid19, para impulsar las medidas coordinadas que requiere para garantizar su supervivencia.
Las consecuencias derivadas de la pandemia, la modificación en los hábitos de consumo de la población, las limitaciones a la movilidad de las personas, la reducción de aforos y la limitación de los horarios de apertura “están teniendo consecuencias demoledoras” en estos sectores que están poniendo en peligro la supervivencia de numerosas pequeñas empresas hosteleras y del pequeño comercio local, de las que dependen miles de empleos y numerosas familias. En la provincia de Huelva se contabilizan unas 12.500 pequeñas empresas de estos sectores y en la mayoría de ellas trabajan una media de entre dos y tres personas y sin el apoyo de las administraciones “no podrán afrontar las consecuencias de la pandemia para poder seguir funcionando”. A estas pequeñas empresas hay que sumar los empleos que generan el sector comercial de mayor envergadura donde trabajan miles de personas, la mayoría en condiciones precarias y con contratos temporales, que también están viendo como se reducen sus plantillas.
El escudo social puesto en marcha por el gobierno centra con la prórroga de
ERTEs y las ayudas a las trabajadoras y trabajadores autónomos están suponiendo
un respaldo a estos sectores. No obstante, desde Izquierda Unida se reclama a
todas las administraciones que trabajen conjuntamente y para aportar ayudas
fiscales como bonificaciones y aplazamientos, diseñar campañas de promoción del
pequeño comercio de cercanía y la hostelería local, ayudas a fondo perdido para
que estas pequeñas puedan subsistir, además de programas de respaldo y
asesoramiento para que pueda adaptarse y aprovechar los canales de venta
electrónica y el uso de las redes sociales para mantener su actividad y servir
sus productos a la población.
Además, Izquierda Unida considera que desde ya deben ponerse a trabajar todas las administraciones en el diseño de un plan de recuperación económica para estos sectores que incluya revertir las medidas de liberalización de los horarios de las grandes superficies para apoyar la actividad del pequeño comercio de cercanía y terminar con las ventajas competitivas de las que disfrutan los grandes centros comerciales y que perjudican al pequeño comercio familiar..