Un fenómeno eólico espectacular que va cambiando constantemente las formas y tamaños de las dunas
La mejor forma de conocer el proceso de este fenómeno eólico es visitando el sendero dunar de Doñana, de 1,5 km de extensión, situado al final de Matalascañas, en el límite del Parque Nacional. Estas dunas móviles tienen su origen en las llamadas dunas embrionarias, que son las que nacen junto a la playa por la incidencia del viento dominante del sur-oeste, llamado por estos lares “Foreño”; empujando la arena hacia el interior y formando sucesivos trenes dunares que avanzan sepultando todo lo que se encuentran a su paso. Un fenómeno eólico espectacular que va cambiando constantemente las formas y tamaños de las dunas, desplazando sus crestas a una velocidad media de tres a seis metros al año.
José Antonio Mayo